Por: Dr. Salvador Cárdenas

Los pensamientos que hemos estado comentando son excelentes acerca de la familia, pero ¿por qué entonces en la sociedad actual pareciera muchas veces todo lo contrario?

La gente quiere salir de su casa, los jóvenes no aguantan el contexto familiar, el hombre sale de su casa, la mujer no aguanta la tensión familiar, está acelerada, estresada, angustiada. ¿Por qué tantas familias año con año disuelven esa relación familiar a través de un divorcio o separación?

O quizás no hay separación, pero son como dos extraños el esposo y la esposa en el hogar; o a veces hay un distanciamiento muy grande entre los padres e hijos, o entre los hijos y hermanos; los hermanos no se hablan, no se caen bien uno con otro y la familia no funciona.

¿Por qué lejos de ser aquello que tendría que ser algo tan bello, en muchas ocasiones es todo lo contrario? ¿Será que es equivocado el pretender que el hombre debe de vivir en familia? ¿Será equivocado el decir que en la familia se puede realmente desarrollar el ser humano? ¡Por supuesto que eso no es equivocado!

La familia suple todas esas necesidades, de afecto, amor, compañía, la necesidad de desarrollarnos como humanos, la familia cumple ampliamente todas esas necesidades humanas que todos tenemos.

Pero para que la familia funcione hay que respetarla, hay que conocer las reglas bajo las cuales la familia debe de estar y hay que cumplirlas y respetarlas, de otra manera la familia se convierte en un lugar de peleas, de conflictos, estrés, problemas y en cierto sentido cada persona tiene la familia que ha querido tener.

La familia no es algo que se forme por el azar o las circunstancias, sino por los hechos de cada miembro que la integran.

Analicemos cuáles son los grandes errores que cometen los padres e hijos que provocan que las familias no funcionen y no cumplan el objetivo para lo cual existen.