Por: Dr. Salvador Cárdenas

La dificultad en dormirse es mucho más frecuente en los jóvenes y la dificultad para permanecer dormido es mucho más frecuente en las personas mayores y ancianas. También es más frecuente que las mujeres padezcan insomnio en relación a los hombres.

¿Cómo puede alguien saber si realmente tiene insomnio? El insomnio no es la dificultad para dormir experimentada una noche o dos, eso le puede pasar a cualquier persona. Para hacer un diagnóstico de insomnio hay tres criterios básicos que deben tomarse en cuenta para hacer el diagnóstico.

El primero es el criterio A: debe encontrarse el síntoma predominante, que es la dificultad para iniciar o mantener el sueño, o bien la falta de sueño reparador.

El segundo es el criterio B: la alteración debe presentarse por lo menos tres veces a la semana durante un mes y debe ser lo suficientemente grave como para dar lugar a cansancio diurno o a la observación, por parte de los demás, de otros síntomas atribuibles a alguna alteración del sueño, tales como irritabilidad o deterioro de la actividad diurna.

El tercero es el criterio C: estas alteraciones en el sueño no aparece solamente en el curso de un trastorno del ritmo del sueño-vigilia.

Una persona que cada cinco meses tiene exceso de trabajo y tiene que quedarse a trabajar en la oficina hasta las cinco de la mañana, llega a su casa a dormir media hora y se levanta para irse de nuevo al trabajo está rompiendo el ritmo de sueño-vigilia, lo cual puede afectarle después al tratar de conciliar el sueño.

Para hacer el diagnóstico de insomnio no debe estar roto ese ritmo de sueño-vigilia, sino que la persona debe estar haciendo sus actividades normales y aún así no poder dormir bien sus horas normales de sueño. Si usted reúne estos tres criterios, entonces tiene insomnio.

La hipersomnia o hipersomnolencia incluye dos grupos de síntomas: quejas por la cantidad excesiva de sueño y quejas por una somnolencia excesiva durante el día.

¿Cuáles son los criterios para diagnosticar la hipersomnolencia? El primer criterio es el A: debe haber como síntoma predominante una excesiva somnolencia diurna o crisis de sueño no explicable por una falta de sueño; o bien, la transición prolongada al estado completo de vigilia, es decir, borrachera de sueño.

Para dar positivo el criterio A la persona, a pesar de dormir bien durante la noche, experimenta crisis de sueño durante el día o se despierta después de sus horas normales de sueño y le cuesta mucho trabajo conectarse con las actividades, a esto se le llama borrachera de sueño.

El criterio B es el siguiente: la alteración A debe tener lugar diariamente, por lo menos durante un mes o episódicamente durante prolongados periodos de tiempo y es lo suficientemente grave como para provocar un deterioro en las actividades laborales y sociales.

El criterio C es el mismo que en el caso del insomnio: no debe haber una alteración en el ritmo de sueño-vigilia. La persona debe estar sometida al curso normal de su vida, sus horas normales de trabajo y sus horas normales de sueño.