Por: Ing. Gilberto Sánchez

La semana pasada iniciamos un tema que tiene como propósito responder de forma práctica ante situaciones difíciles por las que puede atravesar una familia.

En el programa anterior, comenzamos hablando acerca de qué hacer en caso de que algún miembro de la familia fuera un adicto, ya sea el alcohol o las drogas; qué hacer si es el padre o si es el hijo.

También mencionamos la falta de perdón, la cual ocasiona un cambio en la vida de la persona; se llena de rencor y resentimiento, se le va la paz definitivamente. Esto trae un deterioro en las relaciones familiares.

Hablamos del adulterio en la familia; de qué forma podemos responder cuando ya se ha comprobado el adulterio. Sólo queremos tratar de dar consejos que usted debe evaluar y valorar si son factibles, si deben aplicarse o no.

Quiero volver a enfatizar lo que dije la semana pasada: estos son consejos que se dan de una manera muy general, porque cada caso es distinto; entonces la manera de resolverlo debe ser distinta.

Si usted tiene dudas, yo le aconsejo que se comunique a nuestra línea telefónica de orientación familiar, para que nos comente su situación y pueda recibir un consejo más acertado para su situación personal.

Lo que hoy vamos a hablar pues, son sugerencias de aspecto general. Cada persona deberá evaluar si conviene actuar de esta forma ante su situación personal. Lo que sugerimos no es algo obligatorio, usted deberá determinar si es el mejor consejo aplicable en su caso.