Por: Dr. Salvador Cárdenas
Yo termino leyendo un texto de las Sagradas Escrituras, para que tú veas lo que ella misma enseña a cerca de la mujer y qué palabras tan bonitas y tan preciosas dice la Biblia cuando una mujer hace bien las cosas.
Proverbios 14 dice así:
La casa y las riquezas son herencia de los padres. Pero de Dios, la mujer prudente.
La mujer prudente es la que sabe hacer su oficio de mamá. Una mujer que sabe hacer su oficio como esposa o como madre es una verdadera herencia de Dios.
Una mujer que no se contenta simplemente con tener bien aseados a sus hijos, ni con tenerles la comida caliente, sino que es una verdadera mujer y madre que sabe ser esposa y que sabe ser madre también. Va mucho más allá de eso.
Le da su lugar a su marido, evita ese carácter consentidor y proteccionista, al cual naturalmente tiende la mujer.
Evita tomar el papel del varón cuando él es necesario para resolver las problemáticas familiares.
Y además sabe ponerle un alto al varón cuando éste está sacando de contexto su propia autoridad.
Y por último, la mujer prudente es aquella mujer que definitivamente no fomenta los antivalores en su hogar.
Qué importantes es pues, que usted misma se haga una evaluación, de cómo está llevando su papel como mujer, como esposa, o como madre.
Si la madre se equivoca y hace su papel de forma inadecuada, esos errores no son errores sencillos, que fácilmente puedan quitarse de en medio.
Si la mujer no hace correctamente lo que como madre tiene que hacer, o como esposa, complica mucho la situación en el hogar.
Por lo tanto, la invitación es: hazte un examen a ti misma, como esposa, no te contentes con decir “yo soy la que mantiene el hogar”, “si no fuera por mí el hogar estuviera desecho”.
Sí, es muy probable que así sea, pero el asunto es que las cosas van mucho más allá de eso.
Tener un hogar y ser una verdadera madre es saber fomentar un carácter correcto y fuerte en nuestros hijos que les ayude a enfrentar la vida.
Tener un hogar es saberle dar al marido su posición en el hogar.
Saber ser una buena madre y mujer, es estar peleada con todos los antivalores que el mundo ofrece hoy en día.
Es muy amplia la labor que como mujer tienes que estar desarrollando. No seas simplista y digas “lo estoy haciendo muy bien”.
Ojalá que este tema te ayude a revalorar tu desempeño en casa como madre y esposa. |