Respetemos y conoscamos el cuerpo humano

Continuando con este tema que es muy basto, quiero tocar otra área que es muy importante resaltar, es el inculcar en nuestros hijos el respeto a sus propios cuerpo, es decir, debemos trabajar en ésta área con gran ahínco enseñándoles a nuestros hijos que sus cuerpos tienen partes las cuales deben de ser respetadas, no deben de ser tocadas, no permitir que nadie esté manipulándolas, enseñarles cómo actuar en un momento dado que alguien quisiera hacerlo.

Que ellos estén concientes y les quede claro que hay ciertas áreas de su cuerpo que son privadas, que nadie tiene por qué estarlas viendo. Obviamente para que un niño tenga estos principios hay que hablar con él, hay que abordar este tema, hay que inclusive, quizá poner ejemplos, situaciones, circunstancias para que el niño pueda entender lo que se le quiere transmitir y también que sepa cómo actuar en un momento en el que él viviera o experimentara una situación similar.

Otro punto importante es instruirlos en el área sexual. Decíamos que veíamos una enorme ignorancia o falta de instrucción en los niños en ésta área, juntamente con toda esta influencia que observamos en la sociedad, toda esta ola de inmoralidad que los está influenciando constantemente observamos muy poca instrucción, muy poca enseñanza, muy pocos principios en ellos para poder corresponder y para poder estar instruyendo a los hijos los padres deben de estar ahí, la responsabilidad es de los padres.

Pero para poder hacer eso, es importante que estudiemos, estemos preparados y documentados, en muchas ocasiones los propios padres ignoran acerca del tema. En una ocasión trabajando con los padres de una escuela secular, estábamos viendo qué tan preparados estaban los padres para poder instruir a sus hijos en el área sexual; se consiguieron unos formatos en los cuales venían los órganos sexuales masculino y femenino, a las madres se les dio el que tenía los órganos sexuales femeninos y a los padres el que tenía los órganos sexuales masculinos, cada uno venía con diferentes señalamientos con los diferentes órganos que componen este aparato, y se les pidió a los padres que llenaran este formato poniendo el nombre correcto a cada una de las partes.

Fue curioso ver que algunos de los padres entregaron sus formatos solamente conociendo una o dos partes de los órganos que componen su aparato reproductor, es decir, ¡no conocían lo básico e indispensable de su propio cuerpo! Y la pregunta es ¿si no lo conocían, cómo iban a poder orientar a sus hijos para que ellos estuviesen preparados para responder a las dudas o inquietudes que tienen los pequeños en su mente?

Para que un padre pueda estar orientando su hijo, debe primero estudiar, investigar, documentarse, y para eso hay diferentes materiales que pueden ser muy útiles, libros que hablan acerca de estos temas, lo cuales cualquier padre responsable debe revisar antes para poder tener los elementos para instruir a sus hijos.
Programa:
Cómo Guardar a Nuestros Hijos de la Inmoralidad II: "Asumiendo una actitud"
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Que los padres no evadan el tema de la sexualidad
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