Por lo general los hombres tienden a utilizar más algunas técnicas y las mujeres otras. Las utilizadas por los hombres tienden a ser más agresivas, violentas o contundentes y las utilizadas por mujeres en ocasiones no lo son tanto, lo cual, como ya indicamos, favorece que no se consuma el suicidio.

Por parte de los hombres, los instrumentos o medios más comunes son las armas de fuego, los saltos al vacío, el lanzamiento al flujo vehicular o el ahorcamiento. Por parte de las mujeres, tienden a utilizar más el uso de medicamentos, la intoxicación por medio gas (monóxido de carbono), el lanzamiento al flujo vehicular y cortarse las venas.

¿Cuáles son los signos de advertencia del comportamiento suicida? ¿Qué debemos esperar ver en una persona que tuviera ese tipo de ideas?

En primer lugar, comportamientos de alejarse de las personas, renunciar a sus actividades, hacer comentarios de suicidarse, observar en la persona llanto constante, el abuso de drogas o la ingesta de alcohol, el descuido de su persona, deja de peinarse, de arreglarse, el comenzar a regalar pertenencias que antes eran valiosas, el ordenar sus asuntos, poner en orden la casa, la limpieza del cuarto, algo que tal vez no era muy cotidiano en la persona y empieza como alistar las cosas como si fuese a salir de viaje.

Hay ciertos cambios físicos como la pérdida de interés en su persona, descuido en la alimentación, pérdida de apetito, pérdida de energía física, insomnio, pérdida de interés sexual, si la persona está casada de repente el cónyuge notará que ya no lo busca, que ya no hay atracción en el área sexual, también el agravamiento de enfermedades menores, podrían ser enfermedades psicosomáticas que demostrarían una depresión en el sistema inmunológico, pensamientos o expresiones de suicidarse, comentarios de que está planeando cómo quitarse la vida, el hecho de que la gente busque el aislarse, el no tener convivencia, el no tener compañerismo con las demás personas sino el encerrarse, puede ser otro síntoma.

Asimismo la desesperanza, que no haya ninguna alternativa, ninguna otra opción para poder resolver sus problemas; la culpabilidad puede ser otro factor y el sentir que no vale la pena continuar luchando.

En cuanto a sus emociones podría observarse un estado de ánimo de tristeza, enojo, apatía, angustia, juntamente con un letargo, una lentitud para hacer las cosas. Es común que utilicen frases como: no puedo seguir adelante, ya nada me importa, estoy pensando en acabar con todo, no seguiré siendo el problema, no hay más solución, estoy cansado de esta vida, no sé porqué estoy vivo, mejor jamás hubiera nacido” . O directamente dice: me voy a matar o pienso quitarme la vida . Es muy importante estar atento a estas señales que son como una alerta, como un foco rojo que nos indica que hay una gran probabilidad de que la persona intente atentar en contra de su vida.

Según especialistas, las personas que intentan quitarse la vida no lo hacen de la noche a la mañana la gran mayoría de ellas. En muchos de los casos existen hasta 3 meses de preparación y de avisos indirectos o directos de la persona que ya está planeando hacerlo. En ocasiones puede haber elaboraciones de cartas póstumas, del testamento, y de hecho entre más específico sea el plan para quitarse la vida según los estudios, es más probable que lo lleve a cabo; si dedica más tiempo, si lo planea mejor hay más probabilidad de que pueda consumarlo y también entre más intentos lleve a cabo, son mayores las probabilidades de que lo consiga.

Si una persona ya intentó quitarse la vida, no la subestime, no piense que ya superó la crisis. Es necesario que pueda buscar apoyo de alguien experto en el tema para que pueda ser auxiliada la persona, porque alguien que ha intentado quitarse la vida requiere una atención tanto emocional como fisiológica, es decir, la atención de algún médico psiquiatra.