Por qué decimos NO al aborto

 

¿Quién abrirá su boca por el mudo?
 

Por: Ing. Gilberto Sánchez

Quisiera abrir las Sagradas Escrituras, el texto que nos dejó el Autor y Dador de vida, para referirme a lo que estamos estudiando. El libro de los Proverbios, del Rey Salomón, señala esto:

“Abre tu boca por el mudo en el juicio de todos los desvalidos.
Abre tu boca, juzga con justicia, y defiende la causa del pobre y del menesteroso”.

Proverbios 31:8

La Escritura manda defender a los débiles, a los que no puede hablar. Es un mandamiento de justicia, es la parte moral y espiritual de lo que estamos hablando.

Hemos visto evidencias científicas del desarrollo humano. Hemos visto que cuando se comete un aborto es un asesinato de un ser que no tiene cómo defenderse. Depende de la vida de su madre para poder sobrevivir.

Hay personas que le importan mucho a Dios: los desvalidos, los pobres, los menesterosos, y en el presente caso estamos hablando del ser más indefenso de todos.

La Biblia nos relata una de las tragedias más grandes que ocurrieron en el pueblo hebreo. Un hombre llamado Herodes mandó matar a una multitud de niños, en Belén.

Ante esa atrocidad, muchos reprobaron a este hombre, y quedó estigmatizado como un hombre perverso que no tuvo ningún tipo de sentimiento para matar a todos esos pequeños indefensos, que en ese momento tal vez podrían correr y esconderse.

Sólo termino con un llamado a reflexionar: No vaya a ser que seamos encontrados como una sociedad peor que Herodes, y digo “peor” porque ya teniendo el conocimiento que nos brinda la ciencia sobre los seres humanos, nos atrevamos a quitar la vida a un ser que es inocente y desvalido, más que aquellos de Belén.

Lo más terrible es que no sólo son autoridades quienes autorizan esta matanza, son los propios padres quienes deciden quitarle la vida al pequeño ser que concibieron. Se vuelven el peor enemigo quitándole la oportunidad de vivir.

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