Por: Dr. Sergio H. Canavati Ayub

El tomar metanfetaminas no es un riesgo de muerte; sin embrago, tiene algunos síntomas, y éstos incluyen: depresión severa, ansiedad, antojos por la droga, irritabilidad, paranoia, corajes espontáneos y violentos y eventualmente cansancio y sueño excesivo. Los antojos intensos por la droga pueden durar semanas, meses y aún años. Un ex-adicto describe su desesperanza y angustia:

“Los síntomas al dejar esta droga son los peores sentimientos que he experimentado en toda mi vida, te sientes como nada, todo lo opuesto al toque, sin control, no te puedes mover sin que te duela todo el cuerpo y esto es después de una semana de dormir. Cuando despiertas nunca es un despertar total, no sientes ninguna emoción, el cerebro no produce ninguna serotonina ni endorfina. La depresión es muy intensa, aquí es cuando puedes hacer una decisión mala, como lesionarte a ti mismo o a otros porque existe ese sentir de un fin inevitable. ¡No lo puedo describir! Es simplemente el fin. La vida pasa frente a ti sin ninguna esperanza a la vista.”

         Los padres deben estar pendientes a los siguientes cambios en la apariencia y conducta en los niños:

• Hablar excesivamente
• Movimientos hiperactivos constantes, temblor, acciones repetitivas (moviendo los pies, los dedos o las rodillas)
• Ansiedad crónica o ataques de ansiedad
• Ataques de pánico
• Paranoia
• Agresividad
• Enojos o explosiones violentas de coraje
• Llagas o lesiones
• Espinillas en la cara, cuello, brazos o piernas
• Problemas con sus dientes, el esmalte desgastado
• Problemas con las encías
• Pérdidas de dientes
• Mal aliento
• Horarios de sueño inconstantes (despierto toda la noche o dormido durante días enteros).
• Círculos oscuros alrededor de sus ojos por falta de dormir
• Desnutrición
• Pérdida repentina y excesiva de peso

         Esperamos que este programa nos sirva para abrir los ojos ante estas drogas y sus efectos mortales en los jóvenes. Muchas gracias por su atención.