Problemas de Aprendizaje (I Parte)
 

¡Juguemos a aprender!
 

Por: Lic. José Eduardo Alvarado

“Se debe observar que los niños entre los seis y los doce años son totalmente lúdicos”, continúa diciendo el artículo. Esto se refiere a que aprenden mayormente jugando, de hecho, hay muchas tendencias al hecho de que los niños deben aprender de esta forma. En ese sentido, el juego se puede convertir en una técnica de estudio.

Además se pueden aprovechar nuevas tecnologías de computación, videojuegos o páginas de Internet donde los padres pueden convivir con el hijo y ayudarle en sus procesos de aprendizaje. En todo esto, el padre juega un papel preponderante.

Además, no hay que olvidar que en diversas librerías se pueden encontrar libros de juegos didácticos que pueden ayudar al niño a aprender cosas complicadas, por ejemplo, las tablas de multiplicar.

Existen una infinidad de materiales en tiendas diseñadas especialmente para promover el aprendizaje en los niños. Se puede echar mano de esto. Algunos materiales son caros, pero ninguna inversión puede ser tan valiosa como la que usted haga para el aprendizaje de sus hijos.

Este columnista hace énfasis en un aspecto importante para que el niño pueda aprender, como ya lo habíamos mencionado antes, en el espacio dedicado al estudio. “En primer término, debe quedar bien establecido desde que el niño entra en el colegio, para evitar que el niño ande de un lado a otro, en lugares donde se puede distraer fácilmente.”

Para nadie es desconocido que a un niño se le puede distraer fácilmente si hay un televisor, por ejemplo; es imprescindible que cuando se separe ese lugar no haya distracciones. También es conveniente que ese lugar sea exclusivamente para eso, de preferencia debe ser un lugar amplio, limpio, iluminado y ventilado.

Desde que el niño ingresa a la escuela debe haber disciplina y orden, para que con el paso del tiempo el niño asimile esto como algo muy valioso para él, que le va a ayudar en su estilo de vida. Lo principal es que él se acostumbre a eso, de esta forma también podrá aprovechar al máximo sus estudios, no tendrá problemas con sus calificaciones, ni con sus maestros y usted se sentirá recompensado por el esfuerzo dedicado a ese trabajo.

Aún hay mucho de qué hablar en este tema, por eso lo invitamos a que esté atento a la segunda parte de este programa, donde vamos a ver aspectos muy importantes como la motivación que debe haber en los padres y otros aspectos que tienen que ver con los procesos interiores o espirituales más importantes, que seguramente serán de su interés. ¡Qué Dios lo bendiga!

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