Por: Dr. Sergio H. Canavati Ayub

Estamos viviendo una crisis moral en los adolescentes que está consumiéndolos y destruyéndolos desde temprana edad, que está degenerando en ellos los valores morales, familiares, y que los está volviendo esclavos de sus deseos y pasiones, llevándolos a situaciones sumamente difíciles de soportar y de aguantar para su edad.

La mayoría de los jóvenes piensan que no hay respuesta a las grandes interrogantes de la vida, para ellos la vida no tiene significado ni propósito, la mayoría de ellos se sienten insignificantes.

¿Se imaginan ustedes lo que es salir caminando en la mañana y sentir que lo que va a ser el adolescente en el día carece de significado?

¿Sabías tú que para muchos adolescentes y jóvenes de tu país, de tu ciudad, carecen de significado sus propias vidas? Tienen mil interrogantes, no encuentran respuestas a estas preguntas que vienen a sus mentes, son presas de sus pasiones y deseos, están abandonados del cuidado de sus padres.

Aún en la escuela hay un alto índice de promiscuidad; los maestros en lugar de enfrentar la situación fomentando los valores morales y éticos, a veces colaboran con malos ejemplos.de la religión, aún dentro de las instituciones oficiales.

Hay malos ejemplos que siguen los jóvenes; se sienten contagiados de imitar esas conductas que ven en la televisión, que oyen en la radio, esas escenas en las video cintas de pornografía o con alto grado de inmoralidad a los cuales son expuestos.

Esas cintas que están produciendo en su vida una imagen y en sus mentes un deseo, después conciben un acto carnal que los lleva muchas veces a la desesperación, al aborto, a las enfermedades venéreas.

Hoy como nunca antes entre los adolescentes las enfermedades venéreas son causa principal de enfermedad entre ellos. Las enfermedades venéreas en adolescentes de los Estados Unidos son las más alarmantes.

La pediatra Mary Anne Sheifer de la Universidad de Medicina de California en San Francisco, reporta lo siguiente:

“Los adolescentes tienen más enfermedades venéreas que ningún otro grupo en los Estados Unidos de América”.

Alrededor de 2.5 millones y medio de personas menores de 20 años están infectados con algún tipo de enfermedad venérea, incluyendo el SIDA.

Muchas de las enfermedades venéreas que padecen hoy los adolescentes y los jóvenes en los Estados Unidos y en Latinoamérica producen esterilidad permanente en sus vidas, nunca podrán ser padres naturales de un hijo.

Qué terrible condición, porque aparentemente el sexo es muy atractivo para el joven, aparentemente es un escape, una rebeldía para salir de su hogar donde no encuentra el afecto, el cariño de sus padres.

Sin embargo, no les han explicado a los jóvenes y a los adolescentes el precio que tendrán que pagar por causa de estos comportamientos sexuales antes del matrimonio como son las enfermedades venéreas.

Muchos adolescentes que creen que el sexo es algo hermoso antes del matrimonio o que les va a llenar su vacío o que es una experiencia emocionante, no saben acerca del embarazo no planeado.

Según una investigación realizada por el Instituto Guttmacher, 1 de cada 4 jovencitas adolescentes queda embarazada antes de los 18 años.

El 85% de los embarazos entre adolescentes son inesperados; la mitad llega a término, un tercio recurre al aborto intencional, y el resto es víctima del aborto involuntario.

Cada año en los Estados Unidos de América, alrededor de un millón de jovencitas menores de 20 años, quedan embarazadas. Un tercio de todos los bebés nacidos de madres solteras, son de muchachas adolescentes.

Aunque estas estadísticas son de los Estados Unidos de Norteamérica reflejan una realidad aplicable a todo el mundo occidental.