Comuniquemos Valores
 

ˇPapá, despierta!
 

Por: Ing. Gilberto Sánchez

Es muy importante que nuestros hijos reciban una buena influencia por parte de sus padres. Padres: tienen que despertar. Si ustedes no están influenciando positivamente a sus hijos en casa, si ustedes no están trabajando para hacerles ver a sus hijos que hay una mejor manera de vivir, que es la correcta y que tiene que ver con el respeto a la vida, con el respeto a la dignidad del ser humano, con no hacer a los demás lo que no quieres que a ti te hagan… si no los influencias tú, alguien más lo va a hacer, pero lo va a hacer mal. Te los van a lastimar y corromper mucho.

Allá afuera hay todo un mundo que trabaja sistemáticamente, día y noche, para inculcarles inmoralidad, maldad y antivalores, y esa forma de vida los va a destruir, y les estará robando su inocencia, para destrozarles la vida desde muy jóvenes.

Padre de familia, tienes que despertar, no todo es trabajo y dinero. Tú hijo necesita de tu tiempo, de tu  dirección, de tu apoyo, de tu ejemplo, porque aquí viene lo duro: si como adulto también estás envuelto en la misma forma inmoral de pensamiento, eso es lo que tu hijo va a aprender. Es decir, si tú como padre no eres responsable, tu hijo no va ser responsable tampoco; si tú como padre no eres honesto, tampoco lo será tu hijo; si no eres una persona fiel, ¿de dónde o de quién esperas que lo aprenda tu hijo?

Tenemos que ser ejemplos positivos para nuestros hijos. Ellos necesitan ver hombres de verdad, mujeres de verdad, con moral, con carácter, dispuestos a amar, dispuestos a darse por los demás, y eso es lo que tienen que ver nuestros hijos primeramente en sus padres.

Vivimos en un tiempo donde lamentablemente, ya no hay ejemplos morales de calidad; no los hay, con todo respeto lo digo. Es muy terrible que jovencitas de 11, 12 o 13 años, sueñen con tener un novio narcotraficante o sicario, porque eso es lo que las está atrayendo, lo que está cautivando a los jóvenes: la vida -a lo mejor corta- pero llena de dinero, llena de placeres, donde aprenden que hoy “lo de valor”, lo que realmente “vale la pena” en la vida, es el placer y hacer lo que tú quieras.

Esos son los valores de hoy, eso es lo que tiene valor para la juventud actual, y es ahí donde se pierde el sentido de la vida, porque no se alcanza a ver que la vida es mucho más que el dinero y claro, se cometen actos muy terribles, que destruyen sus conciencias, sus almas, y finalmente mueren de manera muy abrupta, tienen vidas muy breves, y luego causan mucho dolor a sus familias.

Los jóvenes necesitan ejemplos positivos. Ellos necesitan ver, necesitan entender las bondades de vivir con buenos principios y valores morales.

Mamá, papá, acércate a tus hijos; juega, cena con ellos, platica con ellos. La comunicación no debe solamente limitarse a supervisar: “¿ya hiciste tu tarea?”, “¿ya te bañaste?”. Comunicación es convivir, es ser amigos, es una estrecha relación; de manera que ellos sientan tu amor, tu preocupación, tu interés por ellos. Háblales, enséñales con palabras que los motiven, que los edifiquen, que no se desalienten ni se sientan ofendidos con críticas destructivas. Hay que edificar, no destruir.

Recordemos que la comunicación en casa siempre debe tener esta tendencia: construir, edificar, de modo que nuestros hijos entiendan que esa es la única manera de vivir que les va a dar paz en sus vidas y que les va a traer cosas buenas.

Que sepan que hacer lo correcto siempre les va a permitir construir sus vidas, y no destruirlas. Hay que derribar ese mito de que a través de la ilegalidad, a través de la mentira, del abuso, es como vamos a poder salir adelante; eso es una mentira, eso no trae retribución, realmente es un engaño.
Comuniquemos valores
Condiciones Legales de Uso | Derechos reservados 2012 ©