Por: Lic. Olga Almanza Garrido, Terapeuta familiar

Ahora, la justicia terapéutica, va mas allá de lo que hemos estado hablando, de llevar la Ley al mismo tiempo que esto que se llama salud mental, salud emocional, salud interior.

Entonces lo que se busca con la justicia terapéutica es eso, cerrar círculos. Al tiempo que cerramos el círculo legal cerramos el círculo  humano pretendiendo que la sentencia nos libere de lo judicial y que al mismo tiempo estemos libres en lo personal, hablando del corazón, del alma.

Esto no es nada fácil y pienso que en esta parte se requiere de un apoyo multidisciplinario, es decir, abogados, terapeutas, sicólogos. ¿Qué más nos comentas al respecto?

Lo explicaré con un ejemplo. Un doctor que te opera del corazón difícilmente te operará de cataratas, difícilmente te opera los callos, porque hay especialidades.

En este caso el abogado es un especialista en cuanto a leyes y procedimientos, pero sí tenemos que apoyarnos en un grupo multidisciplinario efectivamente, en sicólogos, terapeutas, educadores, motivadores y en muchas ocasiones hasta representantes religiosos, por eso creo que a cada quien tenemos que darle su justo valor porque todos tenemos necesidades distintas.

Los niños tienen derecho a una sana convivencia ante el divorcio.

Como mujer tú a lo mejor no te esperabas un divorcio porque te peleas a diario con él, no te esperabas que te fueran a llegar con la notificación del divorcio y que además mañana te lo encuentras en el cine con otra persona, así que empiezas a involucrar a los hijos y decir: “Ya ves, tu papá ya no nos quiere”, “Tu papá ya está con otra persona”, “Tu papá ya no nos da dinero”.

De esta manera,  empezamos a involucrar a los hijos. Cuando el juez los manda llamar, los hijos ya vienen aleccionados y entonces ¿Qué pasa?, pues que ya trastocaste su corazón y que tienen que ver con una situación de divorcio. Ellos tienen derecho a una sana convivencia con sus padres, a eso tienen derecho.

Entonces, vuelvo a repetir, ¿Qué estamos haciendo por los derechos de nuestros hijos? Olvídate de los hijos del vecino. A la hora que estás en un procedimiento judicial, vela por los derechos de tus hijos, sean menores o mayores de edad, son tus hijos, por eso es muy importante que esto de la justicia terapéutica se lleve a la práctica, que no sea letra muerta, que no sea un sueño, que no sea simplemente un proyecto piloto sino que efectivamente se lleve y en Justicia para la familia Restaurativa lo estamos haciendo.

Y conforme a tu experiencia profesional, licenciada Edna, como litigante y dentro del Poder Judicial como Juez, ¿Cómo percibes a la familia mexicana actual y cuáles son sus necesidades? Comentabas de enfocarse a las necesidades de la familia. ¿Cuáles son esas necesidades?

Para contestar tu pregunta, voy a referirme a un ejemplo. Estamos viendo mucho el bulling, el ciberbulling, etc. que está causando repercusiones tremendas inclusive en muchachitos que se están suicidando por todo eso que se sienten afectados y vulnerados.

¿A qué me refiero? A la falta de valores. Tenemos que enseñar a nuestros hijos valores, valores familiares, a respetarse a sí mismos, a respetar a los demás, a valorarse a sí mismos y a valorar a los demás. Me gusta una frase que he subido al Facebook que ejemplifica muy bien esto y dice: “El que no brilla, humilla”.